A veces nuestros ordenadores van lentos, cuando esto sucede pueden ser cientos de causas, pero una de las más importantes es la falta de memoria RAM, que es un hecho que es dificíl darse cuenta, porque si sólo se carga un programa el ordenador funciona relativamente bien, pero cuando se cargan varias pestañas en el caso de ser un navegador de internet o más programas, notamos que el ordenador va yendo cada vez mas lento hasta quedarse congelado o incluso que salga un pantallazo azul. Esto también depende mucho de la memoria que utilice el sistema operativo, por ejemplo, Windows 7 con 2 GB de memoria funciona bien, pero Windows 10 requiere al menos 4 GB para funcionar de manera fluida. La cantidad de memoria se puede comprobar de la siguiente manera: en el icono de equipo, botón derecho y propiedades, aparecerá un apartado que es memoria instalada y si tenemos por ejemplo Windows 10 y nuestro ordenador solo cuenta con 2 GB de memoria, habrá que pensar en ampliar la memoria del ordenador.
Otro aspecto importante por lo que el ordenador pueda ir lento es el disco duro, si lo tenemos muy lleno puede ser un problema, ya que propio sistema usa una parte del disco duro para sus tareas propias. El propio sistema nos advierte del espacio que nos queda cuando este es reducido. Si el sistema nos da este aviso hay que pensar en eliminar los archivos inútiles o los archivos grandes como fotos o vídeos pasarlos a pendrives o discos duros externos y una vez pasados eliminarlos del disco de ordenador.
También podemos aumentar la velocidad de nuestro ordenador cambiando el disco duro normal por uno sólido o SSD para entendernos, que son mucho más rápidos y silenciosos, además hoy en día están bastante baratos, por ejemplo un disco SSD de 256 GB en cualquier tienda de informática está por poco menos de 30€. Con estos trucos podemos hacer que nuestro ordenador funcione de manera más fluida y no nos desespere tanto.